tu paso a la naturaleza

Al ser una ruta llena de magníficas cascadas y pequeños lagos y lagunas, es una de las más bellas de Madeira, una mezcla entre el bosque y la montaña de esta zona.

Su punto de partida es la Levada do Alecrim, situada al inicio del descenso hacia la Casa do Rabaçal, a la derecha.

Con unas vistas inigualables sobre Rabaçal, disfruta de toda la fauna y flora que aquí se encuentra.

Al llegar al final de la levada, sigue recto donde encontrarás una pequeña subida entre la vegetación endémica de esta zona. Una vez arriba sigues el camino que cruza Ribeira do Lajeado, hasta volver a seguir el camino junto a una levada.

La ruta desde este punto continúa junto a esta levada. La vegetación, a veces densa, se combina con el sonido de los pájaros y el agua corriendo, siempre rodeado de la belleza de la exótica flora y fauna endémica de la isla de Madeira.

La ruta finaliza en el mismo punto de inicio.